Para ingenieros eléctricos, responsables de mantenimiento y profesionales industriales, la seguridad eléctrica y la continuidad operativa no son simples conceptos. En este contexto, el interruptor diferencial ABB (también conocido como dispositivo de corriente residual – RCDs) emergen como componentes fundamentales de cualquier sistema de protección eléctrica que se considere robusto. Pero ¿qué es un interruptor diferencial eléctrico y por qué su selección e implementación correcta son vitales en entornos industriales? En esta nota explicaremos la protección que brindan estos dispositivos.
¿Qué es un interruptor diferencial y cómo funciona?
Un interruptor diferencial es un dispositivo de protección automática diseñado para detectar fugas de corriente a tierra («corrientes diferenciales») que no fluyen por los conductores activos de retorno. La función de un interruptor diferencial ABB es prevenir riesgos de electrocución e incendios originados por estas fugas.
Su principio de operación implica un diseño ingenioso y eficaz:
- Medición constante: un transformador interno (sensor diferencial) mide simultáneamente la corriente que entra (fase/s) y la corriente que sale (neutro/s) del circuito que protege.
- Detección de desequilibrio: en condiciones normales, la suma vectorial de estas corrientes es cero. Si aparece una fuga a tierra (por ejemplo, a través de una persona o un aislamiento dañado), parte de la corriente se pierde, creando un desequilibrio llamado diferencia o corriente residual.
- Acción de corte: cuando este desequilibrio supera un valor umbral preestablecido, el dispositivo acciona instantáneamente un mecanismo de disparo, desconectando el suministro eléctrico al circuito afectado en milisegundos. Para qué sirve un interruptor diferencial queda claro aquí: salvar vidas y proteger instalaciones.
La importancia del interruptor diferencial eléctrico en entornos industriales
En entornos industriales, las consecuencias de una fuga eléctrica pueden ser catastróficas, ya que pone en riesgo la integridad humana al potenciar el peligro de descargas eléctricas fatales. Por lo regular en una instalación puede haber fugas persistentes de bajo valor, las cuales son fuente común de incendios eléctricos en cables o equipos, con los interruptores diferenciales se pueden evitar estas situaciones.
Una protección diferencial selectiva protege activos evitando daños costosos a equipos sensibles, a la vez que minimiza paradas no planificadas y pérdidas en los procesos de producción. La fiabilidad eléctrica es sinónimo de productividad.
Tipos de interruptor diferencial ABB: adaptados a todas las cargas
Según la norma IEC 61008/61009, los tipos de interruptor diferencial ABB se clasifican por su capacidad de detectar diferentes formas de corriente residual. ABB ofrece la gama completa para cubrir cualquier necesidad industrial:
Tipo AC
Detecta únicamente corrientes residuales, es decir corrientes de fuga de tipo alterno.
Tipo A
Detecta corrientes residuales alternas sinusoidales y corrientes residuales pulsantes (incluso con componente continua de hasta 6 mA). Es el tipo más comúnmente requerido hoy en día.
Tipo B
Detecta corrientes residuales alternas sinusoidales, pulsantes y corrientes residuales continuas suaves (hasta 1000 Hz). Es la solución para las aplicaciones más exigentes como equipos médicos, centros de datos, cargadores de vehículos eléctricos y sistemas fotovoltaicos (inversores).
Los interruptores diferenciales ABB se distinguen por sus características específicas, tales como:
- Alta confiabilidad y durabilidad: diseñados para soportar las duras condiciones industriales
- Sensibilidades adecuadas: amplia gama de sensibilidades disponibles, desde 10 mA hasta 1A
- Intensidades nominales: de hasta 125 A se pueden obtener corrientes mayores usando relés diferenciales
- Facilidad de montaje e integración: compatibles con los sistemas de montaje en carril DIN de ABB, fácilmente integrables en cuadros eléctricos nuevos o existentes
Las aplicaciones de interruptor diferencial ABB cubren un amplio rango del sector industrial, ya que son requeridos por la protección que brindan a la maquinaría y líneas de producción. En los sistemas de distribución para cuadros principales y subcuadros derivados de fábricas otorgando seguridad al momento de distribuir la energía. También en sistemas de control y protección de circuitos para equipos de automatización, como sensores o PLC´s.
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